Es el dibujo de las sombras y las luces, que se deslizan entre las rendijas de las tumbas, hacia la estrella esculpida sobre el suelo donde empieza y acaba este proyecto. El carácter simbólico de la obra se impone sobre su función. Una representación del triunfo de la Vida sobre la muerte, de lo inmaterial e intangible sobre lo material.
Llegar a expresar lo que dibujan estas sombras y luces tuvo que ser precedido de mucha paciencia de todos…aunque los columbarios se construyeron al inicio de las obras, su montaje tuvo que esperar a las excavaciones, al respeto de los vestigios en el subsuelo, la ejecución de la ventilación del suelo, la reconstrucción de las bóvedas superiores, la restauración y mecanizado de las vidrieras, la recuperación y montaje del pavimento de madera, pero sobre todo al secado de los muros. Años de espera para una pequeña intervención.
Mucho esfuerzo de muchos en trabajar para que no se note que se ha trabajado, paradojas de la restauración.